Ana y Juan José

Arrabales tiene la suerte de contar con voluntarios que se entregan incondicionalmente y buscan espacios en sus vidas, para aportar su granito de arena. Es el caso de Ana y Juan José, un matrimonio con grandes corazones, que no hay día que no pasen por la entidad para saber que hace falta o en que pueden ayudar. Cada vez que vienen, Arrabales es una fiesta. Juan José, (er titi) como así lo llaman los chicos, tuvo su pequeño homenaje hace unas semanas, y por petición de ellos, se le ha puesto su nombre a uno de los patios de la Asociación Arrabales; "Patio Juan José". La realidad, es que se lo ha ganado a pulso. Cada día de fiesta, suele salir con ellos, ir al cine, tomar café o disfrutar de una buena merienda, Para ellos, es como un padre, que se preocupa y que siempre está ahí. Para nosotros es un placer contar con voluntarios como ellos, que hacen más fácil nuestra labor.

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